19 de marzo de 2012

Me compré un Smartphone

La semana pasada me compré (compraron) mi primer Smartphone. En realidad fue todo un logro, porque soy de esas personas que no responden inmediatamente a la tecnología. Escoger la tarifa post-pago, la marca y el operador se me hizo un mundo, ya que actualmente las diferencias entre uno y otro son muy mínimas.


La decisión de comprarlo nació porque ya me sentía incomunicada. Todos metidos en sus smartphones; yo solo usando mi radio de Nextel o jugando en el Ipod. Porque este Ipod no es 3G y claro, no recibe llamadas. Muchas veces pasaba que cancelaban la clase por email y como yo no tenía Internet las 24h ni enterada. Necesitaba estar, lamentablemente, más conectada. 


La primera gran decisión fue el operador que iba a utilizar, las dos grandes: Movistar o Claro. En un primer momento pensé en Claro porque dicen que su Internet es más rápido. Entre las personas que podía llamar, la mitad tenía un operador y otra mitad el otro. La variedad de equipos y tarifas parecía mejor en uno, pero yo aún no me decidía.


Para decidirme por la marca y el modelo fue todo un proceso. Ahora con la tecnología es mucho más fácil acceder a información, pero con tanta se vuelve más complicado elegir. En realidad, tienes todo el catálogo abierto para buscar el mejor para ti, antes yo recuerdo que solo era escoge el más bonito y barato. Ahora puedes comparar un equipo con otro, ver en Youtube video reviews de todos lo modelos, preguntar en las redes sociales qué es mejor y claro, qué es peor. La idea, luego de revisar precios y cualidades, era comprar un Android, entonces estaba entre LG y Samsung, porque son las marcas más activas y económicas en este sistema operativo, o al menos así me pareció.




Decidí escoger entre el LG Optimus One y el Samsung Mini, básicamente por el rango de precios. Cuando de pasada fui a un módulo de Movistar en el Jockey Plaza me dijeron que este LG ya no lo tenían pero que en realidad ambos eran iguales, entonces pensé ¿porque no un Samsung? Había manejado antes el Galaxy tab y todo bien. En este mismo centro comercial existe una campaña muy fuerte con esta marca, lo cual debía funcionar a su favor, habían módulos BTL por todas partes y los celulares estaban en display para que el consumidor interactue. Me acerqué a uno de los módulos y fui completamente ignorada por el personal, no había nadie más que yo y las anfitrionas, quienes siguieron conversando mientras yo me acercaba a preguntarles por el celular. En ese momento me di cuenta que no podía comprarme un Samsung. 

Al día siguiente, luego de continuar revisando videos en Youtube, ya no sabía qué comprar. Hablé con mi papá para ver si podíamos comprarlo ese mismo día, él accedió. Sinceramente me emocioné, pero estaba preocupada, ¿y ahora que me compro? Llegamos al centro comercial y mi papá me facilitó las cosas: fuimos a Movistar por elección suya y el plan post-pago también lo eligió él. Entonces, quedaba la última duda, qué modelo comprar. Estaba a punto de comprar el Samsung Mini, pero algo me decía que no lo haga, así que averiguando sobre más modelos, ya en el mismo punto de venta, encontré el LG Optimus Pro, que era idéntico al One, pero con teclado QWERTY y pantalla touch, lo que fue genial porque me tenía preocupada el hecho de cómo iba a tipear en una pantalla tan pequeña. 


Finalmente me decidí por este modelo y ya lo vengo usando una semana. Me parece genial porque puedo estar conectada desde donde esté y ya puedo hacer y recibir llamadas, que con el Nextel no podía.


¿Ya te compraste un Smartphone o piensas hacerlo?